jueves, 25 de octubre de 2012

Documentales Biblioteca Nacional de España

Aquí les dejo dos documentales referidos a la Biblioteca Nacional de España en el 300 aniversario de su creación.

La memoria del mañana



Biblioteca Nacional de España: 300 años haciendo historia


domingo, 21 de octubre de 2012

Repeticiones

 
 
 

Tantas reiteraciones con que nos van a rescatar, un día sí y otro también, y parece que por enésima vez el auxilio es inminente. Esa duda permanente sólo consigue que el tema sea menor en nuestra escala de importancia, la repetición hasta la saciedad de una misma noticia provoca el hastío del receptor.
Estamos en una época de repeticiones en todos los órdenes de nuestra vida. Las mentiras políticas se repiten hasta la saciedad con el fin de que parezcan verdad sin que el logro sea fructífero, las posibles soluciones a la crisis no van a llegar ni se van a materializar porque las repitamos en letanías del absurdo, los programas repetidos y similares del espectro televisivo nos empuja a poner el botón de encendido en off, las continuas referencias a la negatividad de la situación económica nos hace pasar de los noticiarios y así podemos seguir en el plano tanto personal como colectivo.
Se echa de menos síntomas y signos de esperanza, de recuperación y avance en el mañana. Los medios de comunicación prefieren desdibujar la realidad, que sin desmerecerla y contarla como tal cuál es si que se debe ser veraz pero sin caer en la tentación de mostrar lo peor de la misma para crear morbo. Por su parte, los políticos lejos de buscar un solucionario de recetas posibles entre todas las fuerzas ideológicas con posibilidad de gobernabilidad se enfrascan en luchas que no conducen a nada. Hace falta en estos tiempos de zozobra un gobierno multidisciplinar de gestión que pueda enfocar y enfrentar la crisis desde una óptica no partidista y pensando en la ciudadanía. Me temo que me he dejado llevar por la utopía.
Puestos a repetir ahondemos en las noticias positivas del entorno crítico en que estamos, orientemos la realidad hacia los tonos esperanzados del panorama y no nos detengamos en lo sórdido y negativo. Repitan como en un mantra: Saldremos adelante. Otros lo hicieron antes que nosotros.


viernes, 12 de octubre de 2012

Un resfriado y muchos recuerdos

 
 

Este resfriado de otoño, fruto seguramente de la escasez de ropa en noches de pasión con la ventana abierta, me trae este mal dormir nocturno que me lleva a estar pendiente del twitter hasta las dos de la mañana pues basta ponerme en horizontal para que la tos ronca y dolorosa me levante de nuevo hasta que agotado y pastillado recobre el sopor en los albores de la madrugada donde el sueño por fin me invade.
Por esas sorpresivas y extrañas razones de los sueños anoche me llevó Morfeo por los vericuetos de mi infancia para recordarme momentos y sensaciones dormidas en mi interior. Al despertar seguí la senda onírica pero con los sentidos en alerta continuando la resurrección de los recuerdos pasados aunque viviéndolos en presente.
Así que paseé por los paisajes de mi niñez donde los campos frente a mi casa estaban cubiertos por el verde de largas hileras de maíz y los árboles de la finca anexa servían para los juegos y escondites de secretos y amistades. Recuerdos vagos, sin un hilo conductor, pero lleno cada uno de fuerza y vitalidad. Se me viene a la mente la primera caída en bicicleta, las primeras heridas en cruentas batallas infantiles, los primeros escarceos con el género femenino, las travesuras y sus consecuencias en forma de castigo…
Me viene a la memoria momentos gloriosos relacionados con el medio agrícola, propio de aquellos lares y tiempos. Desde la plantación y recogida de las papas al descamisado de las plantas de millo sobre cuyos carozos jugábamos al acabar de desgranar cada piña, y como con una escoba vieja y quemada se removía ese millo tostado en una sartén enorme sobre un fuego campestre. O aquella leche que bebíamos prácticamente desde el pezón de la ubre de aquellas vacas, sin intermediarios de cartón, que amaestrara los bifidus y demás bichos que tuviera la misma.
Un sinfín de recuerdos sin orden ni concierto y que, sin embargo, están cargados de felicidad infantil. Fui feliz, y eso es importante para un niño. También soy feliz ahora…y con la que está cayendo, han de reconocerme la valentía.