lunes, 28 de diciembre de 2015

Fábula: La rana hirviendo

FÁBULA: LA RANA HIRVIENDO.

Ponga una rana en un recipiente lleno de agua y comience a calentar el agua.
A medida que la temperatura del agua empieza a subir, la rana ajusta su temperatura corporal en consecuencia.
La rana se mantiene ajustando su temperatura corporal con el aumento de la temperatura del agua.
Justo cuando el agua está a punto de alcanzar el punto de ebullición, la rana no puede ajustar más.
En este punto la rana decide a saltar.
La rana trata de saltar, pero es incapaz de hacerlo, ya que ha perdido toda su fuerza ajustando la temperatura corporal.
Muy pronto la rana muere.
¿Qué mató a la rana?
¡Piensa en eso!
Sé que muchos van a decir que el agua hirviendo.
Pero la verdad, sobre lo que mató a la rana fue su propia incapacidad para decidir cuándo saltar.
Todos nos tenemos que ajustar, con la gente y las situaciones, pero tenemos que estar seguros cuando tenemos que ajustar y cuando tenemos que seguir adelante.
Hay momentos en los que necesitamos hacer frente a la situación y tomar las acciones apropiadas.
Si permitimos que la gente nos explote física, emocional, financiera, espiritual o mentalmente continuarán haciéndolo.

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Decía Jaime Sabines

Te besaría lentamente, apenas rozándote mis labios, y te diría cualquier cosa en voz baja, y me quedaría dormido a tu lado...pero no estás

      ( Jaime Sabines )

Cuento ruso: la araña Mizguir

La araña Mizguir

En tiempos remotos hubo un verano tan caluroso que la gente no sabía dónde esconderse para librarse de los ardientes rayos del Sol, que quemaban sin piedad. Coincidiendo con esta época de calor apareció una gran plaga de moscas y de mosquitos, que picaban a la desgraciada gente de tal modo que de cada picadura
saltaba una gota de sangre. Pero al mismo tiempo se presentó el valiente Mizguir,
incansable tejedor, que empezó a tejer sus redes, extendiéndolas por todas partes y por todos los caminos por donde volaban las moscas y los mosquitos.

Un día una mosca que iba volando fue cogida en las redes de Mizguir.

Éste se precipitó sobre ella y empezó a ahogarla; pero la Mosca suplicó a Mizguir: –¡Señor Mizguir! ¡No me mates! ¡Tengo tantos hijos, que si los pobres se quedan sin mí, como no tendrán qué comer, molestarán a la gente y a los perros!

Mizguir tuvo compasión de la Mosca y la dejó libre. Ésta echó a volar, zumbando y anunciando a todos sus compañeros: –¡Cuidado, moscas y mosquitos!

¡Escondeos bien bajo el tronco del chopo! ¡Ha aparecido el valiente Mizguir y ha empezado a tejer sus redes, poniéndolas por todos los caminos por donde volamos nosotros y a todos matará!

Las moscas y los mosquitos, a todo correr, se escondieron debajo del tronco del chopo, permaneciendo allí como muertas. Mizguir se quedó perplejo al ver que no tenía caza; a él no le gustaba padecer hambre. ¿Qué hacer? Entonces llamó al grillo, a la cigarra y al escarabajo, y les dijo: –Tú, Grillo, toca la corneta; tú, Cigarra, ve batiendo el tambor, y tú, Escarabajo, vete debajo del tronco del chopo. Id
anunciando a todos que ya no vive el valiente Mizguir, el incansable tejedor; que le pusieron cadenas, lo enviaron a Kazán, le cortaron la cabeza sobre el patíbulo y luego fue despedazado.

El Grillo tocó la corneta, la Cigarra batió el tambor y el Escarabajo se dirigió bajo el tronco del chopo y anunció a todos: –¿Por qué permanecéis ahí como muertos? Ya no vive el valiente Mizguir; le pusieron cadenas, lo mandaron a Kazán, le cortaron la cabeza en el patíbulo y luego fue despedazado.

Se alegraron mucho las moscas y los mosquitos, salieron de su refugio y echaron a volar con tal aturdimiento que no tardaron en caer en las redes del valiente Mizguir. Éste empezó a matarlos, diciendo: –Tenéis que ser más amables y
visitarme con más frecuencia, para convidarme más a menudo, ¡porque sois
demasiado pequeños!

lunes, 14 de diciembre de 2015

Felices Fiestas

Decía Luis Rosales

(...) El dolor es un largo viaje,
es un largo viaje que nos acerca siempre,
que nos conduce hacia el país donde todos los hombres son iguales, (...)
y yo quiero deciros que el dolor es un don
porque nadie regresa del dolor y permanece siendo el mismo hombre [...]

(Fragmento parcial de "La casa encendida")

Reflexionar con... Murialdo Chicaiza

Anatomía del silencio

Entre mis manos la escarcha

se escapa en llanto al suelo

y los surcos renacen.

En mi espalda voy cargando

el inefable letargo de los tiempos

voy llevando la carga invisible

de una ternura desquiciada:

Los frutos de la inocencia.

Entre mis pies se pierde la vida

solo la podredumbre de la rosa

y el césped puedo percibir.

El cardo ya no me lastima.

Entre mis ojos oigo la inmovilidad

de mil álamos céreos y lánguidos

y mi mirada se pierde en un punto

que desconozco. Entonces

mi pensamiento muere blanco

y silencioso se escapa.

Entre mis oídos suena

una violeta verde e ininteligible,

entonces tengo la agilidad

del naranjal y la mariposa.

Entre mis sienes escucho

el constante repiqueo

de un reloj de sol, colocado

en los glaciares eternos

de los montes del olvido.

Entre mi cuerpo y la nada

-¡Oh visión admirable!-

voy por un túnel oscuro

con un silencio concentrado

e incognoscible.

Y en la nada me encuentro

con un paisaje todo blanco:

montes blancos, cielo blanco,

blanca el alba blanca,

solo mi cuerpo desnudo

tiene color. Y entre  mi cuerpo

y la nada estoy sentado

esperando, tal vez, la llegada

de un todo vacío.

 

                       

viernes, 11 de diciembre de 2015

Reflexionar con... Amirhossein Daneshvar

La añoranza

La añoranza es una herida profunda que se ha hecho salada
Los saltos de un pez fuera del agua
sobre las arenas de la playa
La molestia de los rayos penetrantes del sol entrando por las rendijas de la ventana

La añoranza
Es soñar despierto
Es un billete inválido en las manos del pasajero rezagado del Arca de Noé

La añoranza
Es nadar en la laguna de hielo
Es sentarse sobre el cráter con las alas de papel
Es andando descaminado

La añoranza
Es una ventanilla que ha quedado cerrada,
y del otro lado no se puede oír nada
excepto el zumbido de una mosca muriendo...

jueves, 10 de diciembre de 2015

Decía Platón...

Reflexión

"-¿Quieres decirme, por favor, qué camino debo tomar para salir de aquí?-
-Eso depende mucho de a dónde quieres ir - respondió el Gato.
-Poco me preocupa a dónde ir - dijo Alicia.
-Entonces, poco importa el camino
que tomes - replicó el Gato-"

Alicia en el País de las Maravillas
(Lewis Carroll)

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Reflexionar con...Anthony de Mello

BUSCAR EN LUGAR EQUIVOCADO

Un vecino encontró a Nasruddin cuando éste andaba buscando algo de rodillas.

«¿Qué andas buscando, Mullab?».

«Mi llave. La he perdido».

Y arrodillados los dos, se pusieron a buscar la llave perdida. Al cabo de un rato
dijo el vecino: «¿Dónde la perdiste?». «En casa».

«¡Santo Dios! Y entonces, ¿por qué la buscas aquí?»

«Porque aquí hay más luz».

 

domingo, 29 de noviembre de 2015

Reflexionar con...Paulo Coelho

LA HISTORIA DEL LÁPIZ

El niño miraba al abuelo escribir una carta. En un momento dado, le preguntó: 
–¿Estás escribiendo una historia que nos pasó a los dos? ¿Es, quizá, una historia sobre mí? 
El abuelo dejó de escribir, sonrió y dijo al nieto: 
–Estoy escribiendo sobre ti, es cierto. Sin embargo, más importante que las palabras es el lápiz que estoy usando. Me gustaría que tú fueses como él cuando crezcas. 
El niño miró el lápiz, intrigado, y no vio nada de especial. 
–¡Pero si es igual a todos los lápices que he visto en mi vida! 
–Todo depende del modo en que mires las cosas. Hay en él cinco cualidades que, si consigues mantenerlas, harán de ti una persona por siempre en paz con el mundo. Primera cualidad: puedes hacer grandes cosas, pero no olvides nunca que existe una mano que guía tus pasos. A esta mano nosotros la llamamos Dios, y Él siempre te conducirá en dirección a su voluntad. 
Segunda: de vez en cuando necesito dejar de escribir y usar el sacapuntas. Eso hace que el lápiz sufra un poco, pero al final está más afilado. Por lo tanto, debes ser capaz de soportar algunos dolores, porque te harán mejor persona. 
Tercera: el lápiz siempre permite que usemos una goma para borrar aquello que está mal. Entiende que corregir algo que hemos hecho no es necesariamente algo malo, sino algo importante para mantenernos en el camino de la justicia. 
Cuarta: lo que realmente importa en el lápiz no es la madera ni su forma exterior, sino el grafito que hay dentro. Por lo tanto, cuida siempre de lo que sucede en tu interior. 
Finalmente, la quinta cualidad del lápiz: siempre deja una marca. De la misma manera, has de saber que todo lo que hagas en la vida dejará trazos, e intenta ser consciente de cada acción.

viernes, 27 de noviembre de 2015

Subvenciones y excedentes del plátano:reflexión

Esta mañana de camino al trabajo y escuchando la radio, escucho con sorpresa e indignación, como el sector del plátano que está enormemente subvencionado y siempre solicitando más ayudas tira a la basura nada menos que once millones de kilos de dicha fruta. Supongo que ya se viene haciendo desde siempre para controlar los precios pero en una situación de crisis como la actual donde muchas familias pasan necesidad de alimentos básicos resulta vergonzozo que por muy legal que pudiera ser la medida -lo que ya resulta incomprensible en sí misma- ésta se lleve a cabo con la pasividad de las administraciones públicas que deben gestionar que las empresas plataneras canalicen los excedentes a las ONGs que puedan distribuirlos sin que pase por el mercado.

jueves, 26 de noviembre de 2015

La distancia de los corazones

La distancia de los corazones.

Extraído de "Juntos pero no atados"  de Jaime Soler y M. Mercè Conangla

Un día, Meher Baba preguntó a sus mandalíes:
- ¿Por qué las personas se gritan cuando están enojadas?
Los hombres pensaron durante unos momentos.
- Porque pierden la calma- dijo uno-, por eso se gritan.
- Pero, ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? –preguntó Baba-. ¿No es posible hablarle en voz baja? ¿por qué gritas a una persona cuando estás enojado?
Los hombres dieron algunas otras respuestas, pero ninguna de ellas satisfacía al maestro Meher Baba. Finalmente, él explicó:
- Cuando dos personas están enojadas y discuten, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esta distancia, deben gritar para poder escucharse. Mientras más enojadas estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse la una a la otra a través de esa gran distancia.
Luego, Baba preguntó:
- ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran? Pues que no se gritan, sino que se hablan suavemente, ¿por qué?... Sus corazones están muy cerca. La distancia entre ellas es muy pequeña.
Los discípulos lo escuchaban absortos y Meher Baba continuó:- Cuando se enamoran más aún, ¿qué sucede? Los enamorados no hablan, sólo susurran y se acercan más en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo. Así es, observad lo cerca que están dos personas que se aman. Así pues, cuando discutáis, no dejéis que vuestros corazones se alejen, no digáis palabras que los distancien más. Llegará un día en que la distancia será tanta que ya no encontrareis el camino de regreso.

martes, 24 de noviembre de 2015

Cuento indio: lo esencial y lo trivial


  Un hombre se perdió en el desierto. Estaba a punto de perecer de sed cuando aparecieron algunas mujeres que venían en una caravana. El hombre, al borde de la muerte, gritó pidiendo auxilio. Cuando las mujeres se aproximaron a él y lo rodearon, pidió urgentemente agua. Las mujeres empezaron a mirarlo con detenimiento y comenzaron a preguntarse cómo querría el hombre que le sirvieran el agua.

?Preferiría en copa de cristal o en una taza?, ¿en un recipiente de oro o de plata?, ¿tal vez en una jarra?

Ellas hablaban y hablaban interesándose por el objeto, pero, entretanto, el hombre iba agonizando por la ausencia de agua.

 

  *El Maestro dice: Hay un área de ignorancia en la mente humana que la inclina a lo irrelevante y trivial, obnubilando la consciencia de lo Real.

viernes, 20 de noviembre de 2015

Mis galletitas

Un poco fastidiada, la señora va al kiosco y compra una revista, un paquete de galletitas y una lata de naranjada. Preparada para la forzosa espera, se sienta en uno de los largos bancos del andén. 

Mientras hojea la revista, un joven se sienta a su lado y comienza a leer un diario. De pronto, la señora ve, por el rabillo del ojo, cómo el muchacho, sin decir una palabra, estira la mano, agarra el paquete de galletitas, lo abre y después de sacar una comienza a comérsela despreocupadamente.

La mujer está indignada. No está dispuesta a ser grosera, pero tampoco a hacer ver que no ha pasado nada; así que, con gesto ampuloso, toma el paquete y saca una galletita que exhibe frente al joven y se la come mirándolo fijamente.

Por toda respuesta, el joven sonríe y toma otra galletita. La señora gime un poco, toma una nueva galletita y, con ostensibles señales de fastidio, se la come sosteniendo otra vez la mirada en el muchacho. El diálogo de miradas y sonrisas continúa entre galleta y galleta. La señora cada vez más irritada, el muchacho cada vez más divertido. 

Finalmente, la señora se da cuenta de que en el paquete queda sólo la última galletita.

– No podrá ser tan caradura – piensa

.. y se queda como congelada mirando alternativamente al joven y a las galletitas. Con calma, el muchacho alarga la mano, toma la última galletita y, con mucha suavidad, la corta exactamente por la mitad. Con su sonrisa más amorosa le ofrece media a la señora.

– ¡Gracias! – dice la mujer tomando con rudeza la media galletita.
– De nada – contesta el joven sonriendo angelical mientras come su mitad.

El tren llega. Furiosa, la señora se levanta con sus cosas y sube al tren. Al arrancar, desde el vagón ve al muchacho todavía sentado en el banco del andén y piensa:

– Sinverguenza.

Siente la boca reseca de ira. Abre el bolso para sacar la lata de gaseosa y se sorprende al encontrar, cerrado, su paquete de galletitas. !Intacto!

Maestro: las cosas no son siempre como pensamos.

jueves, 19 de noviembre de 2015

El árbol de los problemas

El carpintero que había contratado para que me ayudara a reparar una vieja granja acababa de finalizar su primer día de trabajo. Su cortadora eléctrica se había dañado, haciéndole perder una hora de trabajo, y su viejo camión se negaba a arrancar.

Mientras lo llevaba a su casa, permaneció en silencio. Cuando llegamos, me invitó a conocer a su familia. Mientras nos dirigíamos a la puerta, se detuvo brevemente frente a un pequeño árbol y tocó las puntas de las ramas con ambas manos.

Cuando se abrió la puerta, ocurrió una sorprendente transformación. Su bronceada cara estaba plena de sonrisas. Abrazó a sus dos pequeños hijos y le dio un beso entusiasta a su esposa. 

De regreso me acompañó hasta el carro. Cuando pasamos cerca del árbol, sentí curiosidad y le pregunté acerca de lo que lo había visto hacer un rato antes. 

“Este es mi árbol de problemas —contestó—. Sé que no puedo evitar tener problemas en el trabajo, pero una cosa es segura: los problemas no pertenecen a la casa, ni a mi esposa, ni a mis 
hijos.

Así que simplemente los cuelgo en el árbol cada noche cuando llego a casa, y en la mañana los recojo otra vez. Lo divertido —dijo sonriendo— es que cuando salgo a recogerlos, no hay tantos como los que recuerdo haber colgado la noche anterior”.

miércoles, 18 de noviembre de 2015

El pequeño pez

 «Usted perdone», le dijo un pez a otro, «es usted más viejo y con más experiencia que yo y probablemente podrá usted ayudarme. Dígame: ¿dónde puedo encontrar eso que llaman Océano? He estado buscándolo por todas partes, sin resultado».«El Océano», respondió el viejo pez, «es donde estás ahora mismo».«¿Esto? Pero si esto no es más que agua… Lo que yo busco es el Océano», replicó el joven pez, totalmente decepcionado, mientras se marchaba nadando a buscar en otra parte.

viernes, 13 de noviembre de 2015

Primera página

Ficción o no ficción...es la primera página del último libro de Matilde Asensi "El regreso del Catón" y que, bien podría ser el inicio de un ensayo político, en vez de una novela que promete una buena lectura

lunes, 9 de noviembre de 2015

Reflexionar con...Nicanor Parra

El hombre imaginario

El hombre imaginario
vive en una mansión imaginaria
rodeada de árboles imaginarios
a la orilla de un río imaginario

De los muros que son imaginarios
penden antiguos cuadros imaginarios
irreparables grietas imaginarias
que representan hechos imaginarios
ocurridos en mundos imaginarios
en lugares y tiempos imaginarios

Todas las tardes imaginarias
sube las escaleras imaginarias
y se asoma al balcón imaginario
a mirar el paisaje imaginario
que consiste en un valle imaginario
circundado de cerros imaginarios.

Sombras imaginarias
vienen por el camino imaginario
entonando canciones imaginarias
a la muerte del sol imaginario.

Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria
que le brindó su amor imaginario
vuelve a sentir ese mismo dolor
ese mismo placer imaginario
y vuelve a palpitar
el corazón del hombre imaginario.

sábado, 7 de noviembre de 2015

Decía Oscar Wilde

Reflexión

No se entiende o no se quiere entender.. Tanto en un caso como en otro el resultado es el mismo: palabras al viento de la indiferencia.

Los monólogos son tan inútiles como los diálogos sin conclusiones.

lunes, 28 de septiembre de 2015

Reflexionar con...María Zambrano


La mirada
 
Sólo cuando la mirada se abre al par de lo visible se hace una aurora. Y se detiene entonces, aunque no perdure y sólo sea fugitivamente, sin apenas duración, pues que crea así el instante. El instante que es al par indeleblemente uno y duradero.
La unidad, pues, entre el instante fugitivo e inasible y lo que perdura. El instante que alcanza no ser fugitivo yéndose.Inasible. El instante que ya no está bajo la amenaza de ser cosa ni concepto. Guardado, escondido en su oscuridad, en la oscuridad propia, puede llegar a ser concepción, el instante de concebir, no siempre inadvertido.

       Y así, la mirada, recogida en su oscuridad paradójicamente, saltando sobre una aporía, se abre y abre a su vez, "a la imagen y semejanza", una especie de, circulación.
       La mirada recorre, abre el círculo de la aurora que sólo se dio en un punto, que se muestra como un foco, el hogar, sin duda, del horizonte. Lo que constituye su gloria inalterable.



miércoles, 2 de septiembre de 2015

Reflexionar con...César Vallejo

 

Los nueve monstruos

Y desgraciadamente
el dolor crece en el mundo a cada rato,
crece a treinta minutos por segundo, paso a paso,
y la naturaleza del dolor, es el dolor dos veces
y la condición del martirio, carnívora voraz,
es el dolor dos veces
y la función de la yerba purísima, el dolor
dos veces
y el bien de ser, dolernos doblemente.

Jamás, hombres humanos,
hubo tanto dolor en el pecho, en la solapa, en la cartera,
en el vaso, en la carnicería, en la aritmética.
Jamás tanto cariño doloroso,
jamás tan cerca arremetió lo lejos,
jamás el fuego nunca
jugó mejor su rol de frío muerto.
Jamás, señor ministro de salud, fue la salud
más mortal
y la migraña extrajo tanta frente de la frente.
Y el mueble tuvo en su cajón, dolor,
el corazón, en su cajón, dolor,
la lagartija, en su cajón, dolor.

Crece la desdicha, hermanos hombres,
más pronto que la máquina, a diez máquinas, y crece
con la res de Rousseau, con nuestras barbas;
crece el mal por razones que ignoramos
y es una inundación con propios líquidos,
con propio barro y propia nube sólida.
Invierte el sufrimiento posiciones, da función
en que el humor acuoso es vertical
al pavimento,
el ojo es visto y esta oreja oída,
y esta oreja da nueve campanadas a la hora
del rayo, y nueve carcajadas
a la hora del trigo, y nueve sones hembras
a la hora del llanto, y nueve cánticos
a la hora del hambre y nueve truenos
y nueve látigos, menos un grito.

El dolor nos agarra, hermanos hombres,
por detrás de perfil,
y nos aloca en los cinemas,
nos clava en los gramófonos,
nos desclava en los lechos, cae perpendicularmente
a nuestros boletos, a nuestras cartas;
y es muy grave sufrir, puede uno orar…
Pues de resultas
del dolor, hay algunos
que nacen, otros crecen, otros mueren,
y otros que nacen y no mueren, otros
que sin haber nacido, mueren, y otros
que no nacen ni mueren (son los más)
Y también de resultas
del sufrimiento, estoy triste
hasta la cabeza, y más triste hasta el tobillo,
de ver al pan, crucificado, al nabo,
ensangrentado,
llorando, a la cebolla,
al cereal, en general, harina,
a la sal, hecha polvo, al agua, huyendo,
al vino, un ecce-homo,
tan pálida a la nieve, al sol tan ardio.
¡Cómo, hermanos humanos,
no deciros que ya no puedo y
ya no puedo con tanto cajón,
tanto minuto, tanta
lagartija y tanta
inversión, tanto lejos y tanta sed de sed!
Señor Ministro de Salud; ¿qué hacer?
!Ah! desgraciadamente, hombres humanos,
hay, hermanos, muchísimo que hacer..


martes, 1 de septiembre de 2015

...Y llegó septiembre

 
 
     Y llegó septiembre, dejando atrás para la mayoría el tiempo del descanso y las vacaciones (quienes tengan la suerte de poder disfrutarlas). Vuelve el trabajo y la rutina de los quehaceres diarios.
 
     Terminaba mi última entrada en julio con las dudas de si era un punto y seguido o un punto final en el recorrido de este blog y todavía siguen las dudas pero el aliento de muchos de ustedes me ha hecho reflexionar, así que no sé cuál será la frecuencia con la que escriba algunas palabras en el blog Retazos de Interior, no sé si mis musas harán que las palabras escritas sean mías o tendré que pedirlas prestadas a alguien para compartilas con todos ustedes, no sé tantas cosas...que ni siquiera sé cómo terminar esta entrada.
 
     Un abrazo y mil gracias.
 
 



sábado, 4 de julio de 2015

Feliz verano 2015

 
 
 
Ahora que estamos en verano es un buen momento para parar máquinas y eso es lo que vamos a hacer en el blog Retazos de Interior. Todavía no sé si es una despedida o un descanso.
Tras muchas reflexiones propias y ajenas durante todo este tiempo ahora soy yo quien necesita reflexionar. Quiero dar las gracias a todas las personas que se asoman a esta bitácora para compartir lecturas y pensamientos y seguramente nos encontraremos de nuevo en ésta u otras redes sociales.
En cualquier caso les emplazo en este tiempo a visitar el facebook de Retazos de Interior y que den “me gusta” a la página.

      Que el verano haga desnudar además de los cuerpos las almas de todos para dejar en evidencia además de la piel nuestras propias esencias.
Feliz verano y gracias de nuevo. Hasta luego o hasta nunca...el tiempo dirá.

viernes, 3 de julio de 2015

Reflexionar con...Josefina Plá

 

Sueño de sueños

Secreta noche herida de menguante
cae donde no hay agua ni tierra.
Marcha a cortar el filo de la luna,
mis raíces, que están donde no estuve.

...Traerán mi corazón, negra violeta
que se durmió en la orilla de otro sueño.
Lo he de llamar y no sabrá su nombre.
Me ha de cantar, y no he de comprenderle.

Y llevaré, camino en mediodía
de veinte cielos con opuestos soles,
mi angustia en veinte voces sin mi sangre.

He de llorar mil años sin mi llanto
y he de dormir mil años sin mis ojos
noche con veinte pétalos de luna.


lunes, 29 de junio de 2015

Reflexionar con...Rudyard Kipling

 

No desistas

Cuando vayan mal las cosas como a veces suelen ir,

cuando ofrezca tu camino solo cuestas que subir,

cuando tengas poco haber, pero mucho que pagar,

y precises sonreír aun teniendo que llorar.

Cuando ya el dolor te agobie y no puedas ya sufrir,

descansar acaso debes  !pero nunca desistir!

Tras las sombras de la duda ya plateadas, ya sombrías

puede bien surgir el triunfo, no el fracaso que temías.

Y no es dable a tu ignorancia figurarse cuan cercano

puede estar el bien que anhelas y que juzgas tan lejano.

Lucha, pues, ¡por más que tengas en la brega que sufrir!

Cuando todo esté peor, más debemos INSISTIR!
 
 


miércoles, 24 de junio de 2015

Reflexión


 
Lo que tarda tanto en llegar es igual que si no
 hubiera llegado, peor incluso, porque el
cumplimiento a destiempo de lo que tanto se
deseó acaba teniendo un reverso del sarcasmo.
 
(A. Muñoz Molina)
                                                                               
 


viernes, 19 de junio de 2015

Reflexionar con...Jorge Luis Borges


La espera
 
Antes que suene el presuroso timbre
Y abran la puerta y entres, oh esperada
Por la ansiedad, el universo tiene
Que haber ejecutado una infinita
Serie de actos concretos. Nadie puede
Computar ese vértigo, la cifra
De lo que multiplican los espejos,
De sombras que se alargan y regresan,
De pasos que divergen y convergen.
La arena no sabría numerarlos.
(En mi pecho, el reloj de sangre mide
El temeroso tiempo de la espera.)

Antes que llegues,
Un monje tiene que soñar con un ancla,
Un tigre tiene que morir en Sumatra,
Nueve hombres tienen que morir en Borneo.


viernes, 12 de junio de 2015

Reflexión sobre la amistad

 
 
Esta es una reflexión anónima de origen arabe que alguien me ha enviado y yo la comparto:
 
 
Dos amigos viajaban por el desierto y en un determinado punto del viaje discutieron.
El otro, ofendido, sin nada que decir, escribió en la arena:
"Hoy mi mejor amigo me pegó una bofetada en el rostro".
Siguieron adelante y llegaron a un oasis donde resolvieron bañarse. El que había sido abofeteado y lastimado comenzó a ahogarse, siendo salvado por el amigo. Al recuperarse tomó un estilete y escribió en una piedra:
"Hoy mi mejor amigo me salvó la vida".
Intrigado, el amigo preguntó:
-¿Por qué, después que te lastimé, escribiste en la arena, y ahora escribes en una piedra?
Sonriendo, el otro amigo respondió:
-Cuando un gran amigo nos ofende, deberemos escribir en la arena donde el viento del olvido y el perdón se encargarán de borrarlo y apagarlo; por otro lado, cuando nos pase algo grandioso, deberemos grabarlo en la piedra de la memoria del corazón donde viento ninguno en todo el mundo podrá borrarlo



lunes, 8 de junio de 2015

Cascadas y barranqueras: a propósito del pacto

 

 
                Esta es la semana clave para que las entidades locales tengan medianamente claro quiénes serán los gestores de su acción de gobierno para el horizonte virtual de los próximos cuatro años y para ello ha tenido que ser el acuerdo y el consenso quien medie en tal decisión en estos días aunque a la luz pública lo que lee en la prensa se le parece más al clásico intercambio de cromos.
         Ahora bien, me temo que la autonomía local ha quedado en entredicho en la mayoría de los casos si como parece socialistas y nacionalistas quieren que la zona ajardinada de su chalet regional sea lo más amplia posible.
         No sé si han escuchado alguna vez el estruendo atronador del agua cuando tras las lluvias baja barranco abajo llevándose a su paso lo que encuentra por delante y desembocando en la marea después de sortear pequeñas barranqueras. Es un sonido bronco que asusta y más cuando ves esa masa de agua marrón que parece tragar todo y que tras unos días se convierte en un sendero de agua serena cuyo caudal se va agotando lentamente provocando en los curiosos la sensación extraña de ríos en estas ínsulas donde sólo tenemos barrancos.
         No creo que haya en Canarias cascada alguna en proporción al pacto que se pretende. Quizás esa cascada que aventuran pueda convertirse en un caudal de lodo y piedras arrastradas por esas primeras aguas de lluvia por nuestros barrancos haciendo un ruido que asusta.
         Desde luego que pensar una misma solución para dos administraciones tan diferentes es tener como objetivo prioridades más propias de la serie “juego de tronos” que las que deben marcar el bienestar ciudadano, meta ésta última mucho más próxima en los ayuntamientos donde la cercanía al vecino es mayor y la interrelación entre organizaciones políticas y quienes la forman también.
         Si el cambio que se pretende es que todo se quede como está de arriba hacia abajo pues entonces no cuenten conmigo, ni ahora ni en noviembre…dicho queda.


sábado, 6 de junio de 2015

Cuento popular coreano: la almohada maravillosa

 
Cierto día una anciano sacerdote se detuvo en una posada situada a un lado de la carretera. Una vez en ella extendió su esterilla y se sentó poniendo a su lado las alforjas que llevaba.
Poco después llegó también a la posada un muchacho joven de la vecindad. Era labrador y llevaba un traje corto, no una túnica, como los sacerdotes o los hombres entregados al estudio. Se sentó a corta distancia del sacerdote y a los pocos instantes estaban los dos charlando y riéndose alegremente.
De vez en cuando el joven dirigía una mirada a su pobre traje y, al fin, dando un suspiro, exclamó:
-¡Mirad cuán miserable soy!
-Sin embargo – contestó el sacerdote –, me parece que eres un muchacho sano y bien alimentado. ¿Por qué, en medio de nuestra agradable charla, te quejas de ser un pobre miserable?
-Como ya podéis imaginaros – contesto el muchacho –, en mi vida no puedo hallar muchos placeres, pues trabajo todos los días desde que sale el sol hasta que ha anochecido. En cambio, me gustaría ser un gran general y ganar batallas, o bien un hombre rico, comer y beber magníficamente, escuchar buena música o, quizá, ser un gran hombre en la corte y ayudar a nuestro soberano, sin olvidar, naturalmente, a mi familia que así gozaría de prosperidad. A cualquiera de estas cosas llamo yo vivir digna y agradablemente. Quiero progresar en el mundo, pero aquí no soy más que un pobre labrador. Y, si mi vida no os parece miserable, ya me diréis qué concepto os merece.
Nada le contestó el sacerdote y la conversación cesó entre ambos. Luego el joven comenzó a sentir sueño y, en tanto que el posadero preparaba un plato de gachas de mijo, el sacerdote tomó una almohada que llevaba en sus alforjas y le dijo al joven:
-Apoya la cabeza en esta almohada y verás satisfechos todos tus deseos.
Aquella almohada era de porcelana, redonda como un tubo y abierta por cada uno de sus dos extremos. En cuanto el joven hubo acercado su cabeza a ella, empezó a soñar: una de las aberturas le pareció tan grande y brillante por su parte inferior, que se metió por allí, y en breve, se vio en su propia casa.
Transcurrió algún tiempo y el joven se casó con una hermosa doncella. No tardó en ganar cada día más dinero, de modo que podía darse el placer de llevar hermosos trajes y de pasar largas horas estudiando. Al año siguiente se examinó y lo nombraron magistrado.
Dos o tres años más tarde y siempre progresando en su carrera, alcanzó el cargo de primer ministro del Rey. Durante mucho tiempo el monarca depositó en él toda su confianza, pero un día aciago se vio en una situación desagradable, pues lo acusaron de traición, lo juzgaron y fue condenado a muerte. En compañía de otros varios criminales lo llevaron al lugar fijado para la ejecución. Allí le hicieron arrodillarse y el verdugo se acercó a él para darle muerte.
De pronto, aterrado por el golpe mortal que esperaba, abrió los ojos y, con gran sombro por su parte, se encontró en la posada. El sacerdote estaba a su lado, con la cabeza apoyada en la alforja, y el posadero aún estaba removiendo las gachas cuya cocción aún no había terminado.
El joven guardó silencio, comió sin pronunciar una palabra y luego se puso en pie, hizo una reverencia al sacerdote y le dijo:
-Os doy muchas gracias por la lección que me habéis dado. Ahora ya sé lo que significa ser un gran hombre.
Y dicho esto, se despidió y, satisfecho, volvió a su trabajo, que ya no le parecía tan miserable como antes.