La muerte no se lleva a los seres amados. Al contrario, los guarda y los ennoblece en la memoria. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente.
La muerte no se lleva a los seres amados. Al contrario, los guarda y los ennoblece en la memoria. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente.
La muerte no existe, la gente sólo muere cuando la olvidan; si puedes recordarme, siempre estaré contigo.
Se acerca el Día de los Finaos para recordar a todos aquellos que nos dejaron y lo hago con este tema musical denominado "Días de finaos" que pone en valor esta tradición canaria.
La letra es de Carmen Rivero y la música de Domingo Quintana; ha sido grabada en octubre de 2018 por el grupo Tabaiba en los estudios de Pablo Quintana, bajo la dirección musical de Néstor Lorenzo.
https://youtu.be/wYb9dgYWQg4
Es necesario que sostengamos con firmeza la rienda de nuestro corazón, pues si la aflojamos siempre termina por hacernos perder la cabeza.
Una vez, un hombre perdió una de sus herramientas de trabajo, y se le ocurrió que el ladrón había sido uno de los hijos de su vecino. Durante días, no podía dejar de mirar su forma de caminar, que le parecía que era la de un ladrón, y también su forma de comportarse. Al final, todo lo que hacía le parecía propio de un delincuente.
Días después, encontró sus herramientas en un camino del bosque, y desde entonces todos los gestos de su vecino le parecieron completamente normales.
En la vida, el hombre es elástico y evoluciona, Al momento de la muerte es rígido e inmutable. Las plantas al sol son flexibles y fibrosas pero perecen secas y resquebrajadas. Por ello lo elástico y flexible sea asocia a la vida y lo rígido e inmutable da la mana a la muerte
Mundo
No vayas a creer lo que te cuentan del mundo
en realidad el mundo es incontable
en todo caso es provincia de ti
no vayas a creer lo que te cuentan del mundo
aun los que te aman mienten sobre
probablemente sin saber que mienten
en la vigilia te sentirás lejano
testigo de tu mundo desde el mundo
sin nubes de tu aliento en los cristales
la humareda del hombre se elevar en la noche
y no sabrás de donde viene el fuego
pero la expectativa te volver humilde
en el mundo el abismo es un oficio
las preguntas en vano / una vieja costumbre
los desatinos / marca de abolengo
no vayas a creer lo que te cuentan del mundo
(ni siquiera esto que te estoy contando)
ya te dije que el mundo es incontable.
No es solo una biblioteca. Es una nave espacial que te llevará a los puntos más lejanos del universo, una máquina del tiempo que te llevará al pasado lejano y al lejano futuro, un maestro que sabe más que ningún ser humano, un amigo que te divertirá y te consolará y sobre todo una salida a una vida mejor, más feliz y más útil
( Isaac Asimov )
La cumbre. Ahí está el ocaso, todo empurpurado, herido por sus propios cristales, que le hacen sangre por doquiera. A su esplendor, el pinar verde se agria, vagamente enrojecido; y las hierbas y las florecillas, encendidas y transparentes, embalsaman el instante sereno de una esencia mojada, penetrante y luminosa.
No importa cuán oscura sea la noche, espero el alba, y aquéllos que viven en el día esperan la noche. Por tanto, regocíjate, y mantente íntegro, si puedes, y devuelve amor por amor
Aún debemos aprender el arte de vivir en un mundo sobresaturado de información. Y también debemos aprender el aún mas difícil arte de preparar a las próximas generaciones para vivir en semejante mundo.
Soy
Soy suave y triste si idolatro,
puedo bajar el cielo hasta mi mano cuando
El alma de otro al alma mía enredo.
Plumón alguno no hallarás más blando.
Ninguna como yo las manos besa,
Ni se acurruca tanto en un ensueño,
Ni cupo en otro cuerpo, así pequeño,
Un alma humana de mayor terneza.
Muero sobre los ojos, si los siento
Como pájaros vivos, un momento,
Aletear bajo mis dedos blancos.
Sé la frase que encanta y que comprende
Y sé callar cuando la luna asciende
Enorme y roja sobre los barrancos.
Hay un lugar en el corazón que nunca se llena. Un espacio que incluso en los mejores momentos nunca se llenará, y esperaremos y esperaremos en ese espacio.
Quiero y he de probar que la inteligencia de la mujer, lejos de ser un absurdo o un defecto, un crimen o un desatino, es su mejor adorno, es la verdadera fuente de su virtud y de la felicidad doméstica porque Dios no es contradictorio en sus obras y cuando formó al alma humana, no le dio sexo.
( Juana Manso )
#DíaDeLasMujeresEscritoras
De la brevedad engañosa de la vida
Menos solicitó veloz saeta
Destinada señal, que mordió aguda;
Agonal carro en la arena muda
No coronó con más silencio meta,
Que presurosa corre, que secreta,
A su fin nuestra edad. A quien lo duda
(Fiera que sea de razón desnuda)
Cada sol repetido es un cometa.
Confiésalo Cartago, ¿y tú lo ignoras?
Peligro corres, Licio, si porfías
En seguir sombras y abrazar engaños.
Mal te perdonarán a ti las horas,
Las horas que limando están los días,
Los días que royendo están los años.
Esta es la historia de un muchachito que tenía muy mal carácter. Su padre le dio una bolsa de clavos y le dijo que cada vez que perdiera la paciencia, debería clavar un clavo detrás de la puerta.
El primer día, el muchacho clavó 37 clavos detrás de la puerta. Las semanas que siguieron, a medida que él aprendía a controlar su genio, clavaba cada vez menos clavos detrás de la puerta.
Descubrió que era más fácil controlar su carácter durante todo el día.
Después de informar a su padre, éste le sugirió que retirara un clavo cada día que lograra controlar su carácter. Los días pasaron y el joven pudo finalmente anunciar a su padre que no quedaban más clavos para retirar de la puerta.
Su padre lo tomó de la mano y lo llevó hasta la puerta. Le dijo: "Has trabajado duro, hijo mío, pero mira todos esos hoyos en la puerta. Nunca más será la misma. Cada vez que tú pierdes la paciencia, dejas cicatrices exactamente como las que aquí ves".
Tú puedes insultar a alguien y retirar lo dicho, pero el modo cómo se lo digas lo devastará y la cicatriz perdurará para siempre. Una ofensa verbal es tan dañina como la ofensa física. Los amigos son joyas preciosas. Nos hacen reír y nos animan a seguir adelante. Nos escuchan con atención y siempre están dispuestos a abrirnos su corazón. Tenlo siempre presente.
Anoche se me ha perdido
en la arena de la playa
un recuerdo
dorado, viejo y menudo
como un granito de arena.
¡Paciencia! La noche es corta.
Iré a buscarlo mañana...
Pero tengo miedo de esos
remolinos nocherniegos
que se llevan en su grupa
—¡Dios sabe adónde!— la arena
menudita de la playa.
Siembra un acto y cosecharás un hábito. Siembra un hábito y cosecharás un carácter. Siembra un carácter y cosecharás un destino.