Gracias a todos y todas. Gracias a todas aquellas personas que lo han visitado, a las que me han realizado sugerencias y puntualizaciones como forma de mejorar este blog, a las que han opinado sobre el mismo con abierta sinceridad y a todas aquellas que lo abren para seguir las entradas que hago con frecuencia desigual.
No tengo grandes pretensiones. Es un camino autodidacta que inicio en el ánimo de compartir reflexiones, ideas, opiniones y experiencias.
En estos últimos días el trabajo por la mañana ha sido intenso y las tardes se han ido en pequeñas tareas y trabajos pendientes que había que resolver, por ejemplo, la lectura atrasada de varios libros y documentación del trabajo para ponernos al día además de la visita al dentista que se hacía ya ineludible. ¡ Si hubiera ido apuntando las cantidades que he abonado a cuenta de los dichosos dientes ya tendría para las vacaciones de los dos próximos veranos! Resulta sorprendente la cantidad de cosas que vas aparcando para cuando tengas más tiempo, pero éste nunca llega y así te encuentras de golpe con infinidad de tareas: renovación del DNI, renovación del carnet de conducir, gestiones en el ayuntamiento, dentista, oculista, limpieza del trastero y un largo etcétera. Si es que somos optimistas por naturaleza y pretendemos un espacio de tiempo que no tenemos; y aunque el refrán hable de no dejar para mañana lo que puedas hacer hoy, el problema es que en el presente no hay tiempo para todo, ni siquiera organizándonos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario