Ayer, el equipo de “La Roja” nos hizo sufrir por un motivo diferente durante noventa minutos. La prima de riesgo y demás parentela que nos viene atenazando desde hace no sé cuánto tiempo ya quedó aparcada en la banda para que la mayoría de españoles nos preocupáramos por si Silva daba el pase perfecto para Iniesta o Torres tuviera un buen día.
Fue un partido para sufrir, pero ya estábamos entrenados en los últimos tiempos por lo que no se nos hizo muy cuesta arriba. Yo creo que nos estamos acostumbrando a esta situación en tanto en cuanto la gravedad parece que es eterna, no existe un camino visible que conduzca a una solución a corto plazo y no se vislumbra un horizonte nítido.
Seguiremos sufriendo…pasamos a cuartos en el deporte de masas que arrasa Europa, esa misma Europa que nos hace sufrir por vía económica. El final del torneo está cerca en ambos contextos y todavía nada está ganado.
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