lunes, 28 de diciembre de 2015

Fábula: La rana hirviendo

FÁBULA: LA RANA HIRVIENDO.

Ponga una rana en un recipiente lleno de agua y comience a calentar el agua.
A medida que la temperatura del agua empieza a subir, la rana ajusta su temperatura corporal en consecuencia.
La rana se mantiene ajustando su temperatura corporal con el aumento de la temperatura del agua.
Justo cuando el agua está a punto de alcanzar el punto de ebullición, la rana no puede ajustar más.
En este punto la rana decide a saltar.
La rana trata de saltar, pero es incapaz de hacerlo, ya que ha perdido toda su fuerza ajustando la temperatura corporal.
Muy pronto la rana muere.
¿Qué mató a la rana?
¡Piensa en eso!
Sé que muchos van a decir que el agua hirviendo.
Pero la verdad, sobre lo que mató a la rana fue su propia incapacidad para decidir cuándo saltar.
Todos nos tenemos que ajustar, con la gente y las situaciones, pero tenemos que estar seguros cuando tenemos que ajustar y cuando tenemos que seguir adelante.
Hay momentos en los que necesitamos hacer frente a la situación y tomar las acciones apropiadas.
Si permitimos que la gente nos explote física, emocional, financiera, espiritual o mentalmente continuarán haciéndolo.

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Decía Jaime Sabines

Te besaría lentamente, apenas rozándote mis labios, y te diría cualquier cosa en voz baja, y me quedaría dormido a tu lado...pero no estás

      ( Jaime Sabines )

Cuento ruso: la araña Mizguir

La araña Mizguir

En tiempos remotos hubo un verano tan caluroso que la gente no sabía dónde esconderse para librarse de los ardientes rayos del Sol, que quemaban sin piedad. Coincidiendo con esta época de calor apareció una gran plaga de moscas y de mosquitos, que picaban a la desgraciada gente de tal modo que de cada picadura
saltaba una gota de sangre. Pero al mismo tiempo se presentó el valiente Mizguir,
incansable tejedor, que empezó a tejer sus redes, extendiéndolas por todas partes y por todos los caminos por donde volaban las moscas y los mosquitos.

Un día una mosca que iba volando fue cogida en las redes de Mizguir.

Éste se precipitó sobre ella y empezó a ahogarla; pero la Mosca suplicó a Mizguir: –¡Señor Mizguir! ¡No me mates! ¡Tengo tantos hijos, que si los pobres se quedan sin mí, como no tendrán qué comer, molestarán a la gente y a los perros!

Mizguir tuvo compasión de la Mosca y la dejó libre. Ésta echó a volar, zumbando y anunciando a todos sus compañeros: –¡Cuidado, moscas y mosquitos!

¡Escondeos bien bajo el tronco del chopo! ¡Ha aparecido el valiente Mizguir y ha empezado a tejer sus redes, poniéndolas por todos los caminos por donde volamos nosotros y a todos matará!

Las moscas y los mosquitos, a todo correr, se escondieron debajo del tronco del chopo, permaneciendo allí como muertas. Mizguir se quedó perplejo al ver que no tenía caza; a él no le gustaba padecer hambre. ¿Qué hacer? Entonces llamó al grillo, a la cigarra y al escarabajo, y les dijo: –Tú, Grillo, toca la corneta; tú, Cigarra, ve batiendo el tambor, y tú, Escarabajo, vete debajo del tronco del chopo. Id
anunciando a todos que ya no vive el valiente Mizguir, el incansable tejedor; que le pusieron cadenas, lo enviaron a Kazán, le cortaron la cabeza sobre el patíbulo y luego fue despedazado.

El Grillo tocó la corneta, la Cigarra batió el tambor y el Escarabajo se dirigió bajo el tronco del chopo y anunció a todos: –¿Por qué permanecéis ahí como muertos? Ya no vive el valiente Mizguir; le pusieron cadenas, lo mandaron a Kazán, le cortaron la cabeza en el patíbulo y luego fue despedazado.

Se alegraron mucho las moscas y los mosquitos, salieron de su refugio y echaron a volar con tal aturdimiento que no tardaron en caer en las redes del valiente Mizguir. Éste empezó a matarlos, diciendo: –Tenéis que ser más amables y
visitarme con más frecuencia, para convidarme más a menudo, ¡porque sois
demasiado pequeños!

lunes, 14 de diciembre de 2015

Felices Fiestas

Decía Luis Rosales

(...) El dolor es un largo viaje,
es un largo viaje que nos acerca siempre,
que nos conduce hacia el país donde todos los hombres son iguales, (...)
y yo quiero deciros que el dolor es un don
porque nadie regresa del dolor y permanece siendo el mismo hombre [...]

(Fragmento parcial de "La casa encendida")

Reflexionar con... Murialdo Chicaiza

Anatomía del silencio

Entre mis manos la escarcha

se escapa en llanto al suelo

y los surcos renacen.

En mi espalda voy cargando

el inefable letargo de los tiempos

voy llevando la carga invisible

de una ternura desquiciada:

Los frutos de la inocencia.

Entre mis pies se pierde la vida

solo la podredumbre de la rosa

y el césped puedo percibir.

El cardo ya no me lastima.

Entre mis ojos oigo la inmovilidad

de mil álamos céreos y lánguidos

y mi mirada se pierde en un punto

que desconozco. Entonces

mi pensamiento muere blanco

y silencioso se escapa.

Entre mis oídos suena

una violeta verde e ininteligible,

entonces tengo la agilidad

del naranjal y la mariposa.

Entre mis sienes escucho

el constante repiqueo

de un reloj de sol, colocado

en los glaciares eternos

de los montes del olvido.

Entre mi cuerpo y la nada

-¡Oh visión admirable!-

voy por un túnel oscuro

con un silencio concentrado

e incognoscible.

Y en la nada me encuentro

con un paisaje todo blanco:

montes blancos, cielo blanco,

blanca el alba blanca,

solo mi cuerpo desnudo

tiene color. Y entre  mi cuerpo

y la nada estoy sentado

esperando, tal vez, la llegada

de un todo vacío.

 

                       

viernes, 11 de diciembre de 2015

Reflexionar con... Amirhossein Daneshvar

La añoranza

La añoranza es una herida profunda que se ha hecho salada
Los saltos de un pez fuera del agua
sobre las arenas de la playa
La molestia de los rayos penetrantes del sol entrando por las rendijas de la ventana

La añoranza
Es soñar despierto
Es un billete inválido en las manos del pasajero rezagado del Arca de Noé

La añoranza
Es nadar en la laguna de hielo
Es sentarse sobre el cráter con las alas de papel
Es andando descaminado

La añoranza
Es una ventanilla que ha quedado cerrada,
y del otro lado no se puede oír nada
excepto el zumbido de una mosca muriendo...

jueves, 10 de diciembre de 2015

Decía Platón...

Reflexión

"-¿Quieres decirme, por favor, qué camino debo tomar para salir de aquí?-
-Eso depende mucho de a dónde quieres ir - respondió el Gato.
-Poco me preocupa a dónde ir - dijo Alicia.
-Entonces, poco importa el camino
que tomes - replicó el Gato-"

Alicia en el País de las Maravillas
(Lewis Carroll)

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Reflexionar con...Anthony de Mello

BUSCAR EN LUGAR EQUIVOCADO

Un vecino encontró a Nasruddin cuando éste andaba buscando algo de rodillas.

«¿Qué andas buscando, Mullab?».

«Mi llave. La he perdido».

Y arrodillados los dos, se pusieron a buscar la llave perdida. Al cabo de un rato
dijo el vecino: «¿Dónde la perdiste?». «En casa».

«¡Santo Dios! Y entonces, ¿por qué la buscas aquí?»

«Porque aquí hay más luz».